IMPORTANCIA DE LOS HÁBITOS EN LA EDUCACIÓN INFANTIL

Educar desde  niño a que se aquieran correctos hábitos

Si estamos hablando continuamente de adquisiciones,  modificación o incremento de hábitos, será necesario saber qué significa este término.

Entendemos como hábito aquella conducta que, una vez aprendida, se lleva a cabo siempre, aunque las circunstancias  externas cambien.

La vida cotidiana es la situación más cercana  y más estable para los seres humanos, especialmente para los niños y por ello es uno de los grandes recursos con los que  deben contar sus educadores, padres y profesores en general, en lo que acontece cada día es donde se realiza su desarrollo. 

Por  ejemplo, cepillarse  los dientes antes de irse a dormir es un hábito saludable. Si te los cepilles normalmente, pero cuando  sales por la noche y llegas tarde o cuando vas de acampada (viaje) no lo haces, no se puede decir que lo tengas adquirido.

Solamente lo habrás adquirido si, incluso cambiando las circunstancias  externas (llegar tarde, ir de acampada, etc), continuas cepillandote los dientes antes de acostarte. En caso de que no sea así, en lugar de hábito hablaremos de rutina.

Generalmente un hábito no se adquiere solamente explicándolo  sino que se requieren  varias acciones  educativas, individuales o grupales, con téncicas y recursos educativos eficaces.